El Panathinaikos europeo gritó con fuerza “presente” en el estreno de la League Phase de la Europa League. Los Verdes de Christos Kontis estuvieron espectaculares en Berna, celebrando un gran triunfo por 4-1 sobre el Young Boys. El Trébol reaccionó con carácter tras el mal inicio en la liga y mostró tanto su enorme potencial como sus grandes reservas anímicas como conjunto.

Anass Zaroury estuvo sensacional en el césped del Wankdorf, donde marcó por primera vez con la camiseta del Panathinaikos. Y lo hizo de la forma más rotunda, dejando su firma en la gran victoria del equipo con un increíble hat-trick. Karol Swiderski abrió el camino para la goleada, mientras que todos los Verdes estuvieron sobresalientes en una gran noche europea para el club.

El Trébol comenzó el partido de la mejor manera posible. Tras dos grandes ocasiones de Swiderski en el minuto 2 y en el 8, y una gran parada de Lafont en el 6’ en un mano a mano con Fassnacht, los Verdes encontraron la red. En el 10’, Bakasetas abrió para Zaroury, que centró al segundo palo, donde Tete devolvió de cabeza hacia Swiderski. El delantero polaco siguió la trayectoria del balón, que tomó altura, y con gran ingenio marcó de espaldas a la portería (0-1).

El crescendo ofensivo del Panathinaikos continuó. En el 14’, tras un córner de Renato Sanches y un despeje momentáneo de la defensa suiza, Zaroury sacó un disparo tremendo dentro del área, enviando el balón entre las piernas del portero rival y a la red para el 0-2. El inicio perfecto se completó con un tercer gol antes de los primeros 20 minutos. En el 19’, Bakasetas disparó con potencia desde fuera del área, Keller rechazó con dudas y Zaroury, que siguió la jugada, marcó en el rebote con la zurda para el impresionante 0-3.

El Young Boys intentó reaccionar y recortó (1-3) en el 25’ con un remate de Janko, y hasta el descanso generó tres ocasiones más: en el 37’ con Monteiro, en el 40’ con Males y en el 42’ con Fassnacht.

Los Verdes se reagruparon en el descanso y salieron decididos al campo para “asegurar” la victoria. La primera amenaza llegó en el 55’ con un fuerte disparo con efecto de Kotsiras que se fue rozando el poste, mientras que poco después (58’) fue Bakasetas quien se acercó al gol con un tiro desde la frontal que acabó en manos de Keller.

Era evidente que los Verdes volvían a tener el control absoluto del partido. El cuarto gol era cuestión de tiempo, y efectivamente llegó en el 69’ con el increíble Zaroury de nuevo. Kotsiras puso un centro “dulce” y el marroquí, entrando en el área, remató magníficamente con la diestra desde el punto de penalti para el espectacular 1-4.

Christos Kontis y sus jugadores gestionaron a la perfección el resto del partido y el pitido final les encontró celebrando junto a los aficionados del Trébol que apoyaron con fuerza desde la grada.

Young Boys: Keller, Janko (77’ Andrews), Zesiger, Hadjam, Benito, Fernandes, Gigovic (67’ Raveloson), Males, Fassnacht (77’ Pech), Monteiro (67’ Coley), Bedia (67’ Córdoba).

Panathinaikos: Lafont, Kotsiras, Mladenovic, Ingason, Toumba, Siopis, Renato Sanches (76’ Chirivella), Bakasetas (85’ Taborda), Zaroury (70’ Kyriakopoulos), Tete (76’ Calabria), Swiderski (70’ Dessers).